Democracia y Política hoy!

Martes 22 de agosto, Hotel Sussex, Córdoba.

Jorge Edmundo Barbará: Comienza presentando la noción de lo que son los fenómenos de la Democracia, la cual no implica solamente el funcionamiento de las instituciones, sino también la separación de poderes, el ejercicio de una oposición y la independencia de poderes. Mientras que el ingeniero sostiene que hay que votar al partido que mejor represente los fenómenos institucionales.

Carlos María Lucca: Apela a la figura de una democracia racional, en la que las personas adquieren información y se mantienen informados sobre los hechos públicos. Pero reconoce que en la realidad, la gente se mantiene pasiva y relega espacios que van tomando otras instituciones.
“Es importante que no solamente el Gobierno tome decisiones basadas no solamente en la voluntad de los ciudadanos que se movilizan, sino de la mayoría. Por esta razón, es importante que se mantenga vigente el rol de ciudadano”.

Para Lucca, libertad y desarrollo son dos conceptos que van de la mano, porque mientras más chances y grados de elección tiene una persona para elegir su propio nivel de vida, más posibilidades de progreso tiene. La Educación brinda mayores posibilidades de elección.

A su vez, el funcionamiento de la democracia depende, entre otras cosas, de la elección de nuestros representantes, de las políticas estatales que ellos establezcan y de las libertades comerciales y sociales conquistadas.

Y para esto, la participación activa en la vida pública es muy importante, pero ¿qué es la participación? No hay una sola instancia de participación, sino que hay muchas formas. La elección de los representantes políticos es una de ellas, pero la participación es mucho menos ejercida de lo que se supone; y es un elemento central.

Otro elemento fundamental para la democracia es el ejercicio de las instituciones informales: esto es el conjunto de prácticas, hábitos y todo tipo de incentivo a la participación para que la ciudadanía mantenga las instituciones vigentes.
“La participación permite mantener vivas a las instituciones y por eso es tan importante”.

Julio Rafael Carballo: Para el sociólogo político, los argentinos votamos porque está estipulado en la Ley Roque Sáenz Peña y porque es una obligación; como consecuencia no seríamos capaces de tomar decisiones. Sin embargo, también señala que no hay condiciones de igualdad para decidir y que no hay conductas socialmente aprehendidas.

A pesar de lo expuesto, mantiene una posición optimista al afirmar que los argentinos queremos votar porque es un deber de la ciudadanía, el cual vemos como una ventaja. La ciudadanía significa tener derechos y obligaciones, pero “nuestro país ha otorgado derechos, pero no reclama las obligaciones”.

La sociedad argentina está en condiciones de votar, entonces, ¿por qué no lo hacemos?
Según Carballo, los hombres argentinos no discuten de política. El acceso a la información no es horizontal, aunque exista la posibilidad de acceder a cierto nivel de información; pero sigue habiendo muchos que no acceden a ella.

En este contexto, la votación termina siendo un apoyo al sistema, una aceptación; pero no hay un compromiso porque se mantiene una actitud individual. Y el voto es una obligación, pero también un derecho.

Los partidos políticos no están democratizados sino burocratizados y elitizados porque ellos designan a quienes tenemos que votar. Pero estamos a tiempo de cambiarlos. ¿Quiénes son los candidatos que proponen los partidos políticos? ¿Cuál es el mecanismo de intermediación en su proceso de selección? La conclusión es que los argentinos participamos muy poco de esto. “No utilizamos esta libertad, sin embargo nos interesa votar y nos gusta hacerlo”, remarca Carballo.

Es necesario reformular las formas de selección de nuestros candidatos e intentar criticar estos mecanismos, sino pasaría lo que sucede actualmente que los candidatos surgen de ámbitos burocratizados de los mismos partidos.

Por último, mediante el voto también regulamos las conductas autoritarias.

¿Qué debemos tener en cuenta cuando votamos? Que la política está formada por hombres, por lo tanto cabe preguntarse quiénes son los que componen las listas, en qué condiciones llegaron y cómo son sus vidas; para ejercer un control sobre quienes votamos. La cuestión es hacernos responsables de quiénes elegimos sabiendo quiénes son.

Otro de los problemas es que las propuestas electorales, son propuestas dirigidas al consumo y no según un consenso de necesidades.

El debate de los candidatos políticos en televisión reflejó que el ganador fue el que tuvo mayor cantidad de respuestas verbales y no tuvo relación alguna con las propuestas electorales.

Debemos votar reflexivamente y buscando información, preguntarnos cuáles son los objetivos de esa fracción del partido que pretende gobernar a la sociedad.
“El compromiso de los jóvenes es profundizar la democracia y disminuir la desigualdad”.

El porcentaje de voto en América Latina es del 33%, es decir que cumplimos con nuestro compromiso formal pero no lo hacemos en condiciones reflexivas.




Segunda etapa de la exposición: La Realidad del sistema político. Kirchner, UCR, Peronismo y el ingreso de los empresarios en la política.

Opiniones de Jorge Edmundo Barbará:

- “Kirchner prescinde de los partidos políticos”
- “Alguien que no sea peronista, ¿puede gobernar en este país?”
- “Los dos presidentes que pertenecían a otro partido político han fracasado”
- “El acuerdo con la oposición está siendo descuidado peligrosamente, cuando sólo por urgencias se prescinde del consenso de otros partidos”.
- “Hay caudillismo pero no hay representación. Hay un sistema de gobierno neo feudal, pero no existe un partido homogéneo”.
- “Las lealtades entre los partidos, no son verdaderas y esto es algo peligroso”.
- Las reformas que se realizan siempre son de emergencia.
-El Kirchnerismo no tiene una estructura de izquierda, excepto su propia declamación porque la praxis no lo confirma. Y los casos de corrupción están presentes también como en el gobierno de Menem.
-El Peronismo va a seguir existiendo porque se maneja por la figura del liderazgo.
-“La UCR es como el Banco Nación, tiene sucursales en todo el país. Fue muy inteligente la respuesta de Negri y de Mestre de acentuar la identidad”.
-Otro de los peligros de la actual gestión son las apuestas al país con fenómenos de inversión que provocan turbulencias.
-Un nuevo fenómeno en la política es la cantidad de empresarios devenidos en políticos, que en lo único que se diferencian es que tienen fondos propios que les permiten moverse con mayor tranquilidad; pero que una vez que se postulan dejan de ser empresarios.

Carlos María Lucca opina que “sin consenso, no hay posibilidades de luchar contra la pobreza”. Otro de los problemas con los que debe enfrentarse la democracia es el surgimiento de nuevos problemas y la falta de respuestas como sociedad. Por otro lado, hay una propensión muy marcada de reconocernos como buenos ciudadanos y delegar culpas a la clase política. El disertante opina que esto es una falasia porque no permite visualizarnos a nosotros mismos como co – responsables de ese escenario.
No existen políticas de Estado que intenten abordar problemas a largo plazo; esto demandaría generación de consenso e independencia de quién esté gobernando de turno.
Otra de las falacias de la conducción nacional actual es la conducta de no hacerse cargo de la herencia recibida; se trata de refundar nuevamente la gestión, instalar otro modelos de país sin hacer un balance en donde se reconozcan aciertos y errores y así establecer una continuidad de políticas. Y esta es la mejor garantía de quedarse en el mismo lugar. El ejemplo de las grandes ciudades que han progresado, demuestran que sólo se logra mediante el consenso, como es el caso histórico del Pacto de la Moncloa.
Cuando no se logra el consenso, la sociedad no logra el juego cooperativo y sólo se logran políticas a corto plazo. La solución, en síntesis, sería “hacernos cargo y sentirnos responsables de las decisiones que tomamos”. Es necesario asumir el rol de ciudadano como tal, de demandar y articular necesidades concretas que se logren a largo plazo. En parte, esa solución depende de nosotros.

El ingeniero Lucca utilizó el concepto de la anomia boba, por el hecho de que somos un pueblo que transgredimos, por el hecho de evitar el acto de la votación, pero no nos damos cuenta de que esta trasgresión nos lleva al fracaso. (Anomia: conjunto de situaciones que derivan de la carencia de normas sociales o de su degradación).

Opina Julio Rafael Carballo, que el empate técnico entre Kirchner y Menem deja al descubierto que actuamos siguiendo a alguien “absolutamente fieles” y luego “nunca lo apoyamos”. En este caso, Menem se retira al advertir la intención de voto del 75% a favor de Kirchner. Siempre privilegiamos a “quien nosotros somos hinchas de” y nunca racionalizamos nuestro apoyo ni decisiones. No nos hacemos cargo de nuestra posición, ni de nuestra posición como opción.

Nuestra posición como ciudadanos es absolutamente pasiva, siempre a lo largo de la historia pedimos que nos digan que hacer. La información en este país sagrada y secreto, cuando no es manipulada por los medios de comunicación.